Desarrollo de la creatividad en los museos. ¿Que sucede cuando los niños van al museo?
Dentro de las comunidades que lo albergan, el museo es considerado hoy en día como una referencia viva de la expresión creativa. Así mismo, estas comunidades los consideran como entidades socio culturales de gran relevancia, dado que cumplen con un rol fundamental en el desarrollo, documentación, organización, interpretación y fomento de la producción creativa de los miembros de la comunidad.
Cuando se considera que las tecnologías emergentes han añadido nuevas dimensiones a la creatividad humana, vemos que el museo se transforma en una entidad que propicia y provee de estímulos constantes a su público visitante, muy especialmente a los niños.
En este sentido, muchos museos alrededor del mundo están activamente dedicados a la actualización tecnológica de sus muestras expositivas. Nunca antes la museografía había tenido que valerse de las herramientas tecnológicas necesarias para alcanzar el paso de las nuevas formas de aprendizaje preferidas actualmente por sus visitantes.
Computadoras, pantallas táctiles e interactivas, experiencias a la vez sensoriales e informativas llenan ahora salas y pasillos de los museos. Así, el desarrollo tecnológico está ampliando rápidamente el campo de la creación de soluciones museográficas. Los museos se adaptan a estas formas únicas de la nueva creatividad, maximizando así su impacto especialmente en los visitantes más pequeños, los niños.
Esta capacidad inspiradora y estimulante que tradicionalmente ha tenido el museo, ahora se ve potenciada por la tecnología, ya que mejora y consigue que la experiencia del visitante sea mucho más personal, activa y dinámica.
El niño que visita un museo está abriendo su mente y su alma a nuevos estímulos que le marcarán una nueva hoja de ruta en su vida.
Inspiración y motivación
Los museos intentan no quedarse atrás con los avances tecnológicos y los usan activamente en sus museografías/exposiciones?. Sin embargo, las visitas guiadas de adultos y niños, acompañados por curadores expertos en las muestras expuestas, son una experiencia única que sitúa a los espectadores en una nueva postura abierta al estímulo sensible de lo que está observando y escuchando simultáneamente. Haciendo de estas visitas una experiencia interactiva, mediante el uso de juegos, las experiencias virtuales, la animación, las carteleras y el cine digital.
El museo de hoy día cuenta con visitantes distintos, cuyas mentes reciben miles de contenidos cargados de información cada día. Como nunca antes, ahora tenemos el reto de enfocarnos para poder recibir, entender y aprovechar la información que selectivamente escojamos.
Es fundamental que los museos también cumplan la tarea de ponerse a la par de los tiempos y de semejantes exigencias, amén de todas las demás tareas museológicas que no son pocas.
La creatividad encuentra ahora en las salas de los museos, un laboratorio de trabajo y exploración. Ese niño que recibe el estímulo visual y sensorial que ofrecen los museos de arte, por ejemplo, llevará dentro de sí la audacia de nuevas paletas de colores, formas expresivas y tendencias.
Un niño de este primer cuarto del siglo XXI va al museo y encuentra un enorme cuadro en la pared, que curiosamente reproduce al grafiti de la calle donde él vive.
Para este niño la concepción del arte seguramente ha cambiado. Con estos cambios su creatividad se enriquece. Nuevas licencias para crear. Nuevos mundos que explorar.
Nuevas maneras de mirar al mundo, que ahora se originan desde dentro de las salas de los museos, cuyas museografías ahora buscan -más que nunca antes- traer al mundo que nos rodea, para ser redescubierto en sus muchas miradas posibles.
Esta estimulante interacción creativa es una de las facetas más interesantes del nuevo rol asumido por el museo de nuestros tiempos.
Por Patricia C Prada Jimenez & the Blogs Team