Mientras transcurre la vida y el hombre, haciendo uso del libre albedrío, lleva a cabo inventos maravillosos o macabros designios ocultos en su “ADN”, la historia, triunfante o dolorosa, impasible, deja testimonio para el futuro, en algún lugar de la tierra. Los MUSEOS son su destino.

Esconden el dolor de la humanidad o su obra dejada al pasar por este mundo.

El Museo de los Inmigrantes de la Ciudad de Buenos Aires, República Argentina, fue construido en el puerto y albergó a miles de desesperados inmigrantes que llegaron durante las grandes guerras mundiales. La ciudad de Buenos Aires y la ciudad de La Plata, ya habían sido edificadas y eran muy modernas. En ese momento estaban finalizando el hotel, anteriormente citado, por mano de obra casi mayoritariamente italiana, francesa y alemana. Eran conocidos los acontecimientos de la proximidad de la primera guerra mundial. Luego vendría otra ola inmigratoria, la más numerosa, de la segunda guerra.

 

LAS DOS GRANDES GUERRAS MUNDIALES

El atentado de Sarajevo fue la chispa que provocó el estallido de la contienda. Fue el asesinato del Archiduque Francisco Fernando, sobrino del Emperador de Austria-Hungría y su próximo sucesor en el trono. El hecho ocurrió el 28 de junio de 1914, cuando el príncipe y su esposa se trasladaron a Sarajevo, Capital de Bosnia, para sellar con su presencia la incorporación oficial de las provincias eslavas al Imperio austro-húngaro. El Embajador austríaco abandonó Belgrado y de inmediato Serbia, apoyada por Rusia, ordenó la movilización general. Austria-Hungría, declaró la guerra a Serbia y Belgrado fue bombardeado al día siguiente. A partir de allí, todos los países entraron en guerra. Los hombres y niños fueron llevados a la guerra, las mujeres y los bebés, con los niños que pudieron esconder quedaron sin alimentos y tuvieron que sobrevivir como pudieron por largos años. Millones de civiles y soldados murieron.

Retomando el tema LOS MUSEOS Y LA EDUCACIÓN, puedo decir que el “Museo de los inmigrantes” de la ciudad de Buenos Aires fue creado por un tratado económico. Llegaron a la República Argentina, aquellos que no fueron aceptados en el puerto de Estados Unidos, por estar desnutridos o enfermos. Hasta que finalmente cerraron el puerto a la inmigración y todos llegaron a la Argentina.

Este enorme edificio fue construido en el puerto, albergando millones de desesperados inmigrantes de diferentes nacionalidades. Fue albergue transitorio. Llegaron en muy malas condiciones de salud. Se les brindó abrigo, comida y cura para aquellos que aun tenían alguna posibilidad. Todas las mañanas llegaban camiones que les ofrecían trabajo y vivienda en provincias de nuestro país. Fueron registrados en la Dirección de Migraciones en su mayoría. Otros barcos llegaron remontando el Río Paraná, Uruguay y las costas del río de La Plata, ilegalmente. Existen testimonios desgarradores de la convivencia en las naves, y en algunos conventillos de la ciudad.

La ayuda fue mutua. Siempre fueron solidarios, no sabían en el lugar que se encontraban. El hotel es un patrimonio histórico, como lo son todos los del mundo. Allí quedaron tristezas, llantos, sangre de los que murieron, cartas, herramientas precarias, baúles, valijas y pequeños objetos que trajeron entre la ropa de cama, cuando tuvieron que huir dejando las puertas abiertas de su patria para no perder la vida. Allí y en los demás museos de otras provincias se atesora lo dejado, junto al sacrificio y las historias de cómo formaron sus familias y las educaron con los más altos valores y sus costumbres. Lo hijos debían estudiar, casi obligatoriamente. Multitud de turistas concurren a diario al Hotel de los Inmigrantes, alumnos con sus maestros, luego de estudiar su historia y descendientes.

Los MUSEOS deben ser venerados. Contienen los acontecimientos de los países. Son centros históricos invaluables. Allí se deben dar conferencias, pasar audiovisuales. Deben formarse guías con personal idóneo, existen álbumes con fotografías de bautismos, casamientos y fiestas familiares realizadas los domingos (único día de descanso) que pueden ser vistas. Deben destacarse los lugares con todos los datos posibles para asesorar a los viajantes y para hacerlos respetar en cada lugar en que se encuentren. Cada país debería exponer su cultura, para ser estudiada por sus descendientes, en los museos.

 

Por Alcira Antonia Cufré, para elephant Minds, República Argentina, 2019. En el tercer tomo del libro Inmigrantes en la Argentina-Éxodo, la autora hace una reseña de las dos Grandes Guerras Mundiales, que provocaron la inmigración.

Biografía de Alcira Antonia Cufré

Visita el Museo de los Inmigrantes