El museo preservador de la historia y el patrimonio

¿Qué es el patrimonio cultural y quién le protege?

El patrimonio cultural es, en su más amplio sentido, a la vez un producto y un proceso del caudal de recursos que se heredan de nuestro pasado, se crean en el presente y se transmiten a las generaciones futuras para su beneficio.

Así, la institución que tradicionalmente representa la defensa del Patrimonio cultural a nivel internacional, ha sido la UNESCO desde su creación. Sin embargo, exploramos ahora el rol social que los museos recién adquieren en el cuidado de dicha riqueza patrimonial de la humanidad.

Es importante reconocer que el patrimonio cultural abarca no sólo el patrimonio material, sino también el patrimonio natural e inmaterial. Esos son una “riqueza frágil”, y como tal requieren políticas y modelos de desarrollo que preserven y respeten su diversidad y su singularidad, ya que una vez perdidos no son recuperables.

Frente a los desafíos más acuciantes a los que se enfrenta toda la humanidad, que van desde el cambio climático y los desastres naturales (tales como la pérdida de biodiversidad o del acceso a agua y alimentos seguros), a los conflictos entre comunidades, la educación, la salud, la emigración, la urbanización, la marginación o las desigualdades económicas, el museo cumple ahora de modo muy especial, un rol esencial en el cuidado de nuestro patrimonio cultural.

Museo custodio del capital cultural

Este papel de custodio adquiere un matiz de especial relevancia, cuando se considera que el patrimonio cultural es absolutamente indispensable para promover la paz y el desarrollo social, ambiental y económico sostenible.

La noción de patrimonio es importante para la cultura y el desarrollo en cuanto constituye el llamado capital cultural de las sociedades contemporáneas. Nuestros diversos patrimonios culturales, inherentes a cada región y cultura, contribuyen a la revalorización continua de las culturas y de las identidades. Son un vehículo importante para la transmisión de experiencias, aptitudes y conocimientos entre las generaciones.

El patrimonio cultural encierra el potencial de promover el acceso a la diversidad cultural y su disfrute. Es fuente de inspiración para la creatividad y la innovación, que generan los productos culturales contemporáneos y futuros. Puede también enriquecer el capital social conformando un sentido de pertenencia, individual y colectivo, que ayuda a mantener la cohesión social y territorial.

Museos con nuevos roles

Por otra parte, el patrimonio cultural ha adquirido una gran importancia económica para el sector del turismo en muchos países, al mismo tiempo que se generan nuevos retos para su conservación. Los costos son en muchos casos exorbitantes y el apoyo de los gobiernos es cada vez más reducido, o en casos, inexistente. La lucha constante de los museos privados es ejemplo vivo de ello.

En este rol asociado a la industria del turismo, entre otras, el museo cumple un papel indispensable como el registrador, organizador, conservador y expositor de dicho patrimonio, entre otras funciones al preservar su “riqueza frágil” para las generaciones futuras.

Consideremos, en primer término, el rol del museo en el componente de Registros e Inscripciones que requiere cualquier aproximación a los recursos patrimoniales de un país. Registrar e inventariar no son ejercicios abstractos, sino acciones instrumentales necesarias que dan una medida del grado de voluntad política en la materia.

En segundo lugar, el componente que implica la Protección, Salvaguardia y Gestión pone de relieve la medida en que las autoridades de museos públicos y privados aseguran la conservación, la valorización y la gestión sostenible del patrimonio.

En tercer lugar, la labor de Transmisión y Movilización de Apoyos observa los esfuerzos desplegados a fin de sensibilizar a las comunidades y ciudadanos y acrecentar su conocimiento sobre el valor y el sentido del patrimonio. Atiende también a las inversiones continuadas en promoción del patrimonio con la implicación del sector privado y de la sociedad civil, de manera que el mensaje de su valor e importancia se transmita a las generaciones futuras.

Podemos observar entonces, como el museo asume un importante trabajo social, en cuanto a su papel como instrumento en la preservación patrimonial y la historia de nuestros pueblos.

Por Patricia C Prada Jimenez & the Blogs Team